La ciudad que se abre en mi
Las silenciosas avenidas,
el recorrido incesante de los tejados purpúreos
Todos conspiran, ventanas y rieles
Todos planean, antenas y felinos
Oprimirme el pecho con un ramillete
De cuerpos estancados
La ciudad que se abre en mi
Las voces de sus habitantes en el llanto
En el que desde mi piel abre las alas